O círculo mágico, John William Waterhouse
Muchos fueron a parar a la hoguera; y con leña
verde ardieron los condenados al fuego lento. Y muchos más fueron sometidos a
tortura. Éstos eran algunos de los instrumentos utilizados para arrancar confesiones,
corregir convicciones y sembrar pánicos:
el collar de púas,
la jaula colgante,
la mordaza de hierro que evitaba gritos incómodos,
la sierra que lentamente te partía por la
mitad,
los torniquetes estrujadedos,
los torniquetes aplastacabezas,
el péndulo rompehuescos,
la silla de pinchos,
la larga aguja que penetraba en los lunares del
Diablo,
las garras de hierro que desgarraban la carne,
las pinzas y tenazas calentadas al rojo vivo,
los sarcófagos con clavos adentro,
las camas de hierro que se estiraban hasta
descoyuntar las piernas y los brazos,
los azotes de puntas de ganchos o de cuchillas,
los toneles llenos de mierda,
el brete, el cepo, las poleas, las argollas,
los garfios,
la pera que se abría y desgarraba la boca de
los herejes, el culo de los homosexuales y la vagina de las amantes de Satanás,
la pinza que trituraba las tetas de las brujas
y de las adúlteras,
el fuego en los pies
y otras armas de la virtud.
GALEANO, Eduardo. Espejos: una historia casi universal. Buenos Aires: Siglo XXI &
Siglo XXI Iberoamericana, 2008. p. 92-3.
NOTA: O texto "Argumentos de la fe" não representa, necessariamente, o
pensamento deste blog. Foi publicado com o objetivo de refletirmos sobre a
construção do conhecimento histórico.
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